En su primera comparecencia ante la Comisión de Ciencia, Universidades e Innovación, el rector Joxerramon Bengoetxea ha explicado las líneas estratégicas para el mandato 2025-2031. Ha remarcado la importancia clave de contar con una financiación suficiente para impulsar la excelencia de la universidad pública vasca y conseguir que se pueda situar entre las 300 mejores universidades del mundo.  En este sentido, ha pedido a los grupos parlamentarios que, por un lado, se prime el liderazgo de la universidad pública en el proyecto de ley del sistema universitario vasco y, por otro, que, a pesar de valorar positivamente el Real Decreto que limita la creación de universidades privadas y garantiza su calidad, velen por que las universidades públicas no se vean perjudicadas.  

El rector  Bengoetxea ha iniciado su comparecencia en el Parlamento Vasco recordando la agresión y el genocidio que respectivamente sufren el pueblo ucraniano en Europa o el pueblo palestino en Oriente Medio. En esta primera aparición ante la Comisión de Ciencia, Universidades e Innovación, ha desgranado las líneas estratégicas de la legislatura 2025-2031 relacionadas con el compromiso de la universidad para responder las necesidades de la sociedad, es decir, “los principales proyectos con perspectiva social”. Ante la falta de vivienda, ha explicado que ya están en marcha sendos proyectos de nuevas residencias de estudiantes en Álava y Gipuzkoa y que en Leioa se quiere trabajar en un proyecto con perspectiva inclusiva.  

Por otra parte, a medio y largo plazo, ha anunciado que ha comenzado el proceso de diseño un Servicio de Atención para el Cuidado Integral y “la ubicación en Bilbao de la Clínica Social Odontológica, uno de nuestros proyectos estrella”.  

Suficiencia financiera  

Para garantizar la calidad de la universidad pública, Bengoetxea considera imprescindible “contar con suficiencia financiera y leyes que posibiliten y protejan el autogobierno y la autonomía de gestión de la universidad”. Ha advertido de que la propuesta del Gobierno español sobre la creación de nuevas universidades, más allá de la cuestión competencial, debe servir para reforzar la autonomía, la calidad y el liderazgo de las universidades públicas.  

En cuanto a la financiación, ha recordado que la universidad tiene como principal seña de identidad jurídica “el reconocimiento de su autonomía, imprescindible para atender sus obligaciones con la sociedad”. De cara a los presupuestos del año que viene, “necesita una financiación adecuada” y ha adelantado que “se está haciendo un diagnóstico exhaustivo de las necesidades y los retos de la universidad”.